El Papa Francisco realiza histórica visita a Córcega, la «isla de la belleza»
En una visita histórica que ha conmovido a los habitantes de la isla francesa, el Papa Francisco llegó a Córcega este domingo, marcando la primera vez que un pontífice pisa suelo corso. Aclamado por una multitud de fieles, el Papa Francisco inició su visita relámpago de nueve horas con un mensaje de paz y esperanza, destacando la rica tradición religiosa de la isla y su importancia en el Mediterráneo.
El Sumo Pontífice, que pronto cumplirá 88 años, arribó a Ajaccio a las 8:49 am, donde fue recibido por el Cardenal François-Xavier Bustillo, obispo de Ajaccio, y otras autoridades locales. A pesar de sus problemas de movilidad, el Papa se mostró enérgico y sonriente, saludando a la multitud desde el papamóvil.
«Es fantástico, de verdad, ¡nunca vino a Córcega! […] ¡Es histórico!», exclamó un emocionado fiel a la prensa. La visita papal ha generado gran expectación en la isla, donde la mayoría de sus 350,000 habitantes se declaran católicos.
Uno de los puntos centrales de la visita fue la participación del Papa en la clausura del congreso sobre «La religiosidad popular en el Mediterráneo». En su discurso, Francisco elogió la profunda devoción popular en Córcega, donde aún persisten tradiciones como las cofradías, el culto a la Virgen y la presencia de numerosos santuarios.
«Córcega, isla de belleza, es un lugar donde la fe se vive con pasión y se expresa en la vida cotidiana», afirmó el Papa. «La religiosidad popular es un tesoro que debemos cuidar y transmitir a las nuevas generaciones».
La visita del Papa a Córcega, aunque breve, ha dejado una huella profunda en la isla. Su mensaje de paz, esperanza y diálogo interreligioso resonará en el Mediterráneo y más allá.