Desde antes de 1854, año en el que su Santidad el Papa Pio IX en su “Inefabilis Deus”, hacía constar la declaración como dogma de fe sobre la creencia que María -Madre de Jesús- había sido preservada del pecado original por parte de la Trinidad Santísima; en todo el orbe católico se celebraba desde la Edad Media la devoción a la Purísima concepción de la Santísima Virgen.

La figura de la Inmaculada Concepción había quedado muy bien para los grandes imperios, pero de manera singular para la monarquía hispánica, porque en ella se reflejaba la pureza de la corona, es decir su misión mesiánica sobre el combate ante las fuerzas del mal. Alrededor de la imagen alegórica de “virgen doncella” y “la mujer del apocalipsis”, se gestaron símbolos e iconos identitarios de los peninsulares; pero al entrar en contacto con el Nuevo Mundo, el fenómeno del incontrolable mestizaje readaptó a esta patrona de la Península Ibérica la cual se convirtió en estandarte de los criollos, mestizos, negros y el resto de la estratificada sociedad colonial [1].

Los cortejos procesionales de la Inmaculada, al igual que el resto de los santos y santas cristianos, se crearon como una pantomima a través de actos rituales que envuelven a estas figuras divinas a través de un variado abanico de iconos creados con fines religiosos, sociales y políticos que propician un mensaje o discurso para las masas. Cofradías, congregaciones y hermandades fueron los espacios ideales para que los laicos pudieran participar en las actividades de la Iglesia, intricados en el concepto del corporativismo que era uno de los pilares del sistema pre-capitalista medieval castellano, que se había reproducido en América y que está presente en todo el periodo de dominación hispánica. Por tanto, estos colectivos  convierten a sus miembros en actores activos de todo el ritual barroco, entre ellos los tradicionales “rezados”.

documentos extraídos de expedientes citados en el AGCA -Archivo General de Centroamérica.

En Santiago de Guatemala, los franciscanos a través de su Venerable Orden Tercera,  fundan una hermandad o cofradía de laicos dedicados al culto a la Inmaculada Concepción de la Bienaventurada Virgen María en su capilla conventual, bajo la advocación del “Cornadillo”; siendo este grupo  un claro ejemplo de las actividades festivas que se realizaban en honor a su santa titular –la Inmaculada Concepción-  durante la temporada de adviento.

¿Qué es un “Rezado”? un rezado es una actividad pública de Fe, que en la actualidad se podría traducir como una “procesión festiva” en honor a Cristo triunfante, alguna advocación gloriosa de María Santísima o de alguno de los santos y santas que han sido elevados a los altares. Se aplica específicamente para la conclusión de un novenario de Concepción dentro del contexto de la época colonial en Guatemala; y en el siglo XXI se apropia del vocabulario popular para referirse a las procesiones de fin e inicio de año[2].

documentos extraídos de expedientes citados en el AGCA -Archivo General de Centroamérica.

En ese sentido, el Doctor Mario Ubico Calderón Estrada dentro de su publicación “Apuntes históricos del ciclo navideño en Guatemala”, en el acápite titulado “Datos históricos sobre la imagen de la Virgen de Concepción del Templo del Guarda Viejo”; menciona  la presencia de la dulce imagen de la Santísima Virgen de Concepción  -la actual “Virgen de los Reyes” que sale a bendecir las calles de su barrio, en la zona 8, para luego dirigirse a la zona 3, zona 11 y 12 cada año en su tradicional “Rezado del día de Reyes, 06 de Enero”-. Ubico  refiere sobre las imágenes que se encontraban en la capilla de la Venerable Orden Tercera de San Francisco, y habla sobre la presencia de esta imagen mariana en documentos localizados dentro del  Archivo General de Centroamérica, cuya documentación permite asimilar el posible aparecimiento de la talla en la capilla de los franciscanos y dentro de los testamentos de hermanos cofrades a partir de  los años 1708 y 1756[3].

Por otra parte, los estudios académicos sobre la imagen de la Inmaculada Concepción del Guarda Viejo no son precisos entorno a las actividades, cultos y la parafernalia que realizaban los terciarios para tales fiestas, estos se presentan como escasos o nulos. Gonzalo Mejía Ruiz en su estudio “Imágenes de la Inmaculada Concepción de María en el Templo de San Francisco”, escribe una sección dedicada a relatar la historia tradicional de la Purísima Concepción de la Divina Providencia. Sin embargo, el antropólogo solo menciona que la Virgen estuvo en una capilla amplia y que sirvió de templo principal, así como un lugar para hacer los cultos, pero no explica ni detalla cómo se vivían esos días durante la segunda década del siglo XIX[4].

Sin embargo, para 1815 el Mayordomo Francisco Dorantes, firma un libro de cuenta y data de la Hermandad de Nuestra Señora de la Purísima Concepción de Maria en la capilla de la Tercera Orden de San Francisco, comenzando este inventario y la contabilidad anual a partir del 16 de diciembre de 1814 hasta el 16 de diciembre de 1815. En dicho documento, se consignan una gran variedad de gastos referentes a las fiestas en honor a su titular, la Inmaculada Concepción de María; durante el año de 1815 que realiza don José Bolaños[5].

documentos extraídos de expedientes citados en el AGCA -Archivo General de Centroamérica.

En las cofradías, muy semejante a lo que sucede en la actualidad, debían invitar a la feligresía para poder ser participes de las actividades religiosas dedicadas a sus titulares sagrados. En consecuencia, entre los preparativos, los “convites” (los cuales son invitaciones); se mandaba a imprimir en imprentas de cofrades, tal y como sucedió con motivo de preparar el rezado de la Virgen del Cornadillo, cuyo cortejo se realizaría en los primeros días de diciembre con su respectiva novena y bailes donde se enviaron a imprimir 1300 estampas con la información descrita  y un posible grabado de la titular[6].

En dicha época, los cortejos procesionales eran iluminados por la tenue luz de las candelas, dando mayor realce visual al acto ritual barroco, especialmente para una celebración de gran envergadura como lo es la de la Concepción, sobre todo para la Orden Franciscana. En la pagina No. 4 del citado inventario, se consigna también que se gastó 36 pesos para sufragar los gastos de cera para iluminar el rezado de la Santísima Virgen [7].

Como las flores, la cera, los convites y otros componentes materiales no se podían dejar de un lado; también la música sirvió como un elemento  importante para los sentidos y para llevar el mensaje evangelizador en diferentes campos, especialmente el político y el cultural. La música de capilla, si se basa en el sistema barroco, estaba inmerso en cada uno de los actos religiosos que se realizaban al interior de los templos coloniales, y en cada una de las horas del oficio divino. La Cofradía del Cornadillo, como actor activo de dichos acontecimientos y anfitriones de la fiesta, pagaron 40.00 pesos al maestro de capilla Vicente Saenz para la armonización del rezado de la Virgen, mientras que, para el novenario pagaron una cantidad de 05.04 pesos al también maestro Joaquín Andrino por la novena preparatoria[8].

fotografía del Archivo de la Hermandad de la Virgen.

El famoso “tambor y tzijolaj” que acompaña en la actualidad  los rezados de concepción, muy vinculado a la cosmología y tradición indígena, sufrió una serie de transformaciones armónicas con el paso del tiempo. Dichos artefactos estaban presente también en el rezado de Nuestra Señora del Cornadillo cuando la hermandad paga 6.2 pesos a dos personas de procedencia racial “indígena” para la ejecución de estos instrumentos autóctonos dentro del cortejo.

Colgaduras en el recinto y ángeles acompañantes de vestir, también se vislumbran en los ricos datos que aporta el documento, por que se consignan a varias imágenes angélicas con el pago de vestiduras y cabelleras pagando a un maestro -“Margarito”- una cantidad de 04.04 pesos por el arreglo de cuatro esculturas y sus respectivas cabelleras.

Otro dato de sumo interés, es que el papel de la mujer tenía una vida activa dentro de las corporaciones religiosas, siendo uno de los pocos, pero muy accesibles espacios, donde ellas podían realizar trabajos de administración, ejecución de objetos y organización jerárquica. De esa cuenta, los documentos ubicados mencionan a Doña Vicenta Zeron, quien se encarga de la costura de las vestimentas de los ángeles, y en años posteriores se patentiza la realización del ajuar de la Santísima Virgen a cargo de doña Gertrudis Jauregui, pero este dato entrará para un próximo estudio[9].

A modo de conclusión, la gran fiesta en honor a Nuestra Señora de  Concepción del Cornadillo, estaba envuelta en una gran variedad de objetos que se profundizaba en el discurso político hispánico por la devoción a la Inmaculada Concepción de Maria Santísima, y que se vería reflejado en la parafernalia del rezado, novena y bailes, que aun hacía eco de la teatralidad barroca que estuvo presente desde el siglo XVII y XVIII.

Doscientos ocho años después, la devoción a la histórica imagen de la Virgen del Cornadillo sigue vigente, aun cuando esta ya no tenga los orígenes coloniales barrocos y el sentimiento franciscano. Sin embargo, estas actividades están presentes, pero en otro contexto, en otro grupo social, en otro recinto, en otra localización y con otra plástica visual; la cual se arropa de un discurso con carácter salesiano y moderno enfocado hacia los jóvenes de un antañón barrio citadino del siglo XXI como es el Guarda Viejo, pero llevando siempre la alegría por el amor a la Inmaculada Concepción del Cornadillo o la “Virgen de los Reyes” cada 6 de Enero.

Escrito por: Jorge Miguel Alvarado España – Estudiante de Historia, Universidad de San Carlos de Guatemala

 

 

 

 

 

Documento de archivo:

Libro de cuenta y data de la Hermandad de Nuestra Señora de Concepcion del Cornadillo de la Venerable Orden Tercera de San Francisco, año 1815.

Bibliografia.

Garcia, Glen. Cucurucho en Guatemala. 2 de enero de 2023. https://cucuruchoenguatemala.com/rezado-o-procesion-hay-diferencia/#:~:text=%C2%BFHay%20diferencia%20entre%20Rezado%20y,Mar%C3%ADa%20en%20sus%20distintas%20advocaciones. (último acceso: 26 de diciembre de 2022).

Mejia Ruiz, Gonzalo. «La Inmaculada Concepcion del Guarda Viejo .» En Las Imagenes de la Inmaculada Concepcion del Templo de San Francisco, Ciudad de Guatemala, de Gonzalo Mejia Ruiz, 41-43. Guatemala: Caudal S.A., 2004.

Rubial Garcia, Antonio. «La Retorica del Bien y el Mal.» En El Paraiso de los Elegidos. Una historia cultural de Nueva España (1521-1804), de Antonio Rubial Garcia, 40-41. Mexico D.F.: Fondo de Cultura Economica , 2010.

Ubico Calderon, Mario. «Datos historicos de la imagen de la Virgen de Concepcion del Templo de la Divina Providencia (Guarda Viejo) de la Nueva Guatemala de la Asuncion .» En Apuntes historicos del Ciclo Navideño en Guatemala , de Mario Ubico Calderon, 53-55. Antigua Guatemala, Guatemala: Consejo Nacional para la Proteccion de la Antigua Guatemala, 2007.

 

Referencias


[1] Rubial Garcia, Antonio. «La Retorica del Bien y el Mal.» En El Paraiso de los Elegidos. Una historia cultural de Nueva España (1521-1804), de Antonio Rubial Garcia, 40-41. Mexico D.F.: Fondo de Cultura Economica , 2010.

[2] Garcia, Glen. Cucurucho en Guatemala. 2 de enero de 2023. https://cucuruchoenguatemala.com/rezado-o-procesion-hay-diferencia/#:~:text=%C2%BFHay%20diferencia%20entre%20Rezado%20y,Mar%C3%ADa%20en%20sus%20distintas%20advocaciones. (último acceso: 26 de diciembre de 2022).

[3] Ubico Calderon, Mario. «Datos historicos de la imagen de la Virgen de Concepcion del Templo de la Divina Providencia (Guarda Viejo) de la Nueva Guatemala de la Asuncion .» En Apuntes historicos del Ciclo Navideño en Guatemala , de Mario Ubico Calderon, 53-55. Antigua Guatemala, Guatemala: Consejo Nacional para la Proteccion de la Antigua Guatemala, 2007.

[4] Mejia Ruiz, Gonzalo. «La Inmaculada Concepcion del Guarda Viejo .» En Las Imagenes de la Inmaculada Concepcion del Templo de San Francisco, Ciudad de Guatemala, de Gonzalo Mejia Ruiz, 41-43. Guatemala: Caudal S.A., 2004.

[5] AGCA, Seccion Fondo Colonial, Legajo 40.615, Exp. 5784, A1, Pag.1-6.

[6] AGCA, Seccion Fondo Colonial, Legajo 40.615, Exp. 5784, A1, Pag.4-7.

[7] AGCA, Seccion Fondo Colonial, Legajo 40.615, Exp. 5784, A1, Pag.4-7.

[8] AGCA, Seccion Fondo Colonial, Legajo 40.615, Exp. 5784, A1, Pag.5

[9] AGCA, Seccion Fondo Colonial, Legajo 40.615, Exp. 5784, A1, Pag.7.