La Procesión del Silencio
Mientras la jacaranda cae sobre las orillas de las aceras de las banquetas anunciando el arranque de una Cuaresma más como esta siempre lo ha hecho, el segundo día de este tiempo se apertura con una de las manifestaciones religiosas más importantes y no menos esplendorosa que las demás, que desde el año de 1955 ha cobrado un matiz único y una particularidad específica, la cual la hace definirse con el título de la Procesión del Silencio de Jesús de los Milagros.
Tal cortejo es realizado año con año el Primer Jueves de Cuaresma (jueves después de Ceniza) por la Asociación de Jesús Nazareno de los Milagros del Santuario Arquidiocesano del Señor San José en la Nueva Guatemala de la Asunción acompañada por miles de devotos y devotas cargadoras que salen a su encuentro para elevar ruegos y plegarias alrededor de esta imagen barroca de Cristo cargando el pesado madero de nuestras angustias y necesidades.
Hacia la mitad de los años 50´s del Siglo pasado, Don Mario Ruata Asturias, quien era en ese entonces el presidente encargado de la veneración y culto a la Consagrada Imagen de Jesús Nazareno de los Milagros, instituyó en un lejano 24 de febrero de 1955 esta actividad con el fin primordial de preparar y consolidar espiritualmente a la feligresía guatemalteca en un preámbulo preparativo para la posterior Semana Santa.
Don Mario Ruata tomó como referencia el viacrucis penitencial con Jesús del Perdón que observó varios años en la Antigua Guatemala. Este fue un gran paso para vincular con la mística de religiosidad popular de ese entonces. Imaginemos esa procesión de madrugada, saliendo a las 12 de la noche y recorriendo en silencio las calles hasta llegar al templo de la Recolección, ser recibida por Jesús del Consuelo y la Virgen de Dolores, y por supuesto por los miembros de la Hermandad recoleta, y regresar a San José entre cuatro y cinco de la mañana, rezando el Viacrucis. Esto también generó nuevas vinculaciones entre asociaciones y hermandades.[1]

Hemeroteca Nacional de Guatemala. Prensa Libre Edición 1970
La fecha aludida anteriormente (24 de Febrero) marcaba en ese momento los albores del primer viernes de Cuaresma, luego de que el Nazareno estuviera sujeto completamente a la disposición de la veneración de los fieles durante todo el día anterior. Desde la media noche y al concluir la ceremonia propia de la Eucaristía, las luces del mueble se encendían y las voces del clarín anunciaba el egreso de esta procesión que recorría los puntos referenciales de la metrópoli al compás del redoblante y de los rezos propios del Santo Viacrucis. Esto forma parte del itinerario procesional de Jesús quien ahora reconstruye una nueva forma de entender el cortejo tradicional del Primer Jueves de Cuaresma con elementos de la época, tales como la implementación de la música fúnebre y las variaciones de dicho cortejo en cuanto a su desplazamiento por otros lugares de la zona 1 capitalina.
Su característica principal era la sencillez que rodeaba el pequeño mueble del Nazareno, recordándonos un pasaje eminentemente espiritual y de penitencia que Jesús en su gran meditación en el desierto durante 40 días y 40 noches -según lo indican las escrituras- había recorrido para moldearse en él la labor salvadora de redención por la humanidad; lo cual contrasta al mismo tiempo con la suntuosa procesión del Domingo de Ramos que también se ha realizado en torno a esta escultura nazarena.
Cabe resaltar la difusión de los hechos a través de los medios escritos de la época previo a este cortejo procesional, como el caso de Prensa Libre que citaba de esta forma el acontecer del momento en su edición del 15 de febrero de 1955 sobre la novedad que representaba la procesión del silencio del Templo de San José: “Por primera vez en la historia religiosa de Guatemala, el próximo jueves 24 de los corrientes a las 12 y media de la noche se llevará a cabo la solemne procesión del silencio de la venerada imagen de Jesús Nazareno de los Milagros, que se venera en la iglesia de San José de esta capital”.[2]

Hemeroteca Nacional de Guatemala. Prensa Libre Edición 1965 (Muestra del adorno y su descripción luego de haberse realizado la solemne procesión de Jesús de los Milagros de la Iglesia de San José en Guatemala)
La nota periodística informaba también del recorrido que realizaría ese primer año. “El itinerario que seguirá será el siguiente: salida del templo, 5a. calle hasta la 3a. avenida, luego recorrerá la 3a. avenida de sur a norte hasta la 4a. calle por donde bajará hasta la 12 avenida, callejón del Judío, avenida de San José y entrada al templo”.[3] La participación en la procesión inicialmente era exclusiva para hombres.
Dicha procesión se mantuvo inalterable durante los siguientes dieciséis años, hasta que en 1971, debido el crecimiento desmesurado de la capital y las fuertes oleadas políticas que azotaban al país dentro del contexto del Conflicto Armado Interno, obligó a que el rector del templo en esa época, Monseñor Tomás Barrios Sánchez y la Asociación presidida por el Directivo Miguel Ángel Sosa Ponce determinaran remover el horario y el apelativo de la procesión.
En el año aludido, la procesión se realizó en la noche del Primer Jueves de Cuaresma con el acompañamiento de una banda de música que interpretaba selectas marchas fúnebres.
No podemos perder de vista uno de los momentos más memorables y emotivos de la historia de esta procesión acaecida en el año de 1976 ya que el templo fue destruido por el Terremoto del 4 de febrero. La Asociación de Jesús de los Milagros se encontraba frente a una problemática compleja ya que el movimiento telúrico que había destruido en gran parte la Ciudad de Guatemala en vísperas de la cuaresma, se decidió realizar los trabajos propios de los elementos decorativos que formaban parte del anda de Jesús en las afueras de su iglesia de adobe colapsada.
Las andas se levantaron en la parte de atrás del derruido templo, llevando consuelo, esperanza y fe al pueblo guatemalteco que veía en el Nazareno de los Milagros un enlace de misericordia en momentos de riesgo y pavor.

Fotografía reciente. Red Social del Santuario Arquidiocesano del Señor San José.
Los años transcurrieron y la procesión arribó a sus bodas de plata en 1979 y salió del Templo aún en construcción. Luego, en 1980 la procesión retoma nuevamente su carácter penitencial que se había instaurado desde 1955 y al mismo tiempo se suprime el acompañamiento musical que lo había acompañado desde 1971, realizándose en esa oportunidad -1980- en horas de la tarde en el mismo día, es decir el jueves después de Ceniza. Ocho años más tarde vuelve a asumir la rectoría del templo Monseñor Barrios Sánchez y le vuelve a incorporar la banda de música y desde entonces a esta procesión oficialmente se le conoce como “Procesión del Primer Jueves de Cuaresma”, la cual ha permitido al devoto y devota afiliarse aún más para este siglo XXI a la multiplicidad de expresiones que emanan alrededor, no sólo de la procesión sino también de la escultura de Jesús Nazareno, quien ha sido un ente regulador de la piedad citadina de Guatemala y transmisor a la vez de reiteradas bendiciones hacia un pueblo que lo clama cada primer jueves, como también lo hará en este 2022 al escucharse las notas de las marchas fúnebres “El Silencio” de Mariano de Jesús Díaz, “Rey del Universo” de Miguel Ángel Sosa Ponce y “Ramito de Olivo” de Fabián Rojo Chacón previo a su solemne egreso desde el emblemático Santuario acompañado del olor del nardo, corozo e incienso.
Por: Ángel Ricardo Román Contreras – Estudiante de Historia, Universidad de San Carlos de Historia / Redacción de Noticias Estrella
Referencias
- Chaulón Veléz, Mauricio José. Mario Ruata Asturias y la actualización de la Semana Santa en Guatemala: un homenaje a 100 años de su nacimiento. Artículo Publicado en el periódico ejemplar La Hora Gt el 29 de Marzo de 2021.
- Ejemplar del 15 de Febrero de 1955 de Prensa Libre consultado en la Hemeroteca Nacional de Guatemala y de 1965 y 1970.
[1] Chaulón Veléz, Mauricio José. Mario Ruata Asturias y la actualización de la Semana Santa en Guatemala: un homenaje a 100 años de su nacimiento. Artículo Publicado en el periódico ejemplar La Hora Gt el 29 de Marzo de 2021.
[2] Ejemplar del 15 de Febrero de 1955 de Prensa Libre consultado en la Hemeroteca Nacional de Guatemala. Página 6
[3] Idem