
Un símbolo milenario recibido por el Papa León XIV
En el corazón de la solemne Misa de Inauguración de su pontificado, el Papa León XIV recibió el significativo Anillo del Pescador. Este objeto, de profundas raíces bíblicas, representa la continuidad del ministerio petrino y el legado apostólico que se remonta al mismo San Pedro.
La Oficina de Celebraciones Litúrgicas del Sumo Pontífice reveló previamente la imagen del nuevo Anillo del Pescador que sería entregado al Papa León XIV durante la ceremonia en la Plaza de San Pedro. El anillo, adornado con la figura de San Pedro, evoca pasajes cruciales del Nuevo Testamento. En el Evangelio de Mateo (16:19), Cristo confiere a Pedro las llaves del Reino de los Cielos, y en Lucas (22:32), Jesús le encomienda la misión de fortalecer a sus hermanos en la fe y la misión.
De esta manera, el Anillo del Pescador se erige como un símbolo tangible de la fe auténtica y del deber trascendental que se confió al primer Papa.
La Conexión con el apóstol pescador
Dado que San Pedro es conocido como el Apóstol pescador, el anillo recibe el nombre de Anillo del Pescador o Anillo Piscatorio. Esta denominación subraya la ininterrumpida línea de sucesión que une al primer Papa con el pontífice actual.
Una tradición centenaria
El Anillo del Pescador ha formado parte de los símbolos del papado desde al menos el siglo XIII. Inicialmente, se utilizaba como un anillo de sello para autenticar documentos oficiales firmados por el Papa, una práctica que perduró hasta 1842. Hoy en día, su función es principalmente simbólica, aunque cada Papa continúa teniendo su propio anillo personal.
Una tradición singular rodea a este objeto: al fallecer un Papa, su Anillo del Pescador, junto con el Sello de Plomo, es marcado con un cincel. Este acto asegura que el sello no pueda ser falsificado, confiriendo a cada anillo un carácter único e intransferible.
Anillos papales a través de la historia reciente
En la historia reciente, el Papa Benedicto XVI poseyó un anillo de oro grabado con un bajorrelieve de San Pedro pescando desde una barca. Por su parte, el Papa Francisco recibió en 2013 un anillo de plata dorada que previamente había pertenecido al secretario del Papa Pablo VI.
La continuidad del legado petrino
Ahora, el Papa León XIV continúa esta venerable tradición al recibir su propio Anillo del Pescador, adornado con la imagen de San Pedro portando las llaves y la red. Este acto simboliza el traspaso de la antorcha, marcando el momento en que el 266º Sucesor de San Pedro asume oficialmente la misión que le fue encomendada al Príncipe de los Apóstoles hace más de dos milenios. La recepción de este anillo no es solo un rito, sino una profunda conexión con la historia y la responsabilidad inherente al papado.